domingo, 22 de mayo de 2011

Ya ves, no siempre me va bien.

-¿Sabes? Esto es un asco, esta ciudad, este colegio, hasta tú me das asco.
-¿Se puede saber qué te pasa?
-Que quiero salir de aquí, no soy feliz así, no de esta manera... No tengo a nadie junto a mí, estoy sola, no tengo nada por lo que luchar. Mira tú no lo entiendes porque tú tienes a tus amiguitos que te lamen el culo, y te siguen allá por donde vas, pero yo no tengo eso. No tengo a nadie que me dedique una sonrisa día tras día, no tengo a nadie que me alegre el día con una de sus tonterías, yo no puedo estar segura de que alguien dará la cara por mí un día de estos, yo no tengo en quien confiar, nadie que esté dispuesto a ayudarme. Y no, no me vengas con el cuento de que puedo contar con vosotros  porque tus amiguitos ni siquiera me saludan.
-Yo no te iba a contar ningún cuento de esos como tú dices, no. Yo te iba a decir que yo puedo ser esa persona que no tienes, puedo ser yo quien te dedique una de mis sonrisas, yo puedo abrazarte y preguntarte que tal estas, yo puedo hacer mil tonterías por ti, yo daré la cara por ti, en mi podrás confiar y yo te ayudaré.
-Te he dicho que ese cuento ya me lo sé. Cambia de registro, ¿quieres?
-Pero, ¿por qué eres así de borde? ¿Por qué no me crees?
-¿Y por qué debería hacerlo?
-Porque soy la única persona que se ha parado a hablar contigo, a saludarte. Porque yo estoy dispuesto a dar todo y más por una vida junto a ti, porque soy el más guapo y el tío más bueno de todo el colegio, porque tienes los ojos más bonitos que he visto en mi vida, porque cuando te enfadas te pones realmente sexy, porque tienes un carácter que me vuelve loco, porque puede que yo no te merezca porque no soy el mejor chico del mundo, no saco las mejores notas ni me porto digamos realmente bien, pero ¿sabes? Yo te quiero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario