Es un secreto, shhh.

Después de un  tiempo, cierras los ojos, y la única imagen que se te aparece en la mente es él, él que te confesó que sólo jugó contigo, que tú no te lo tomaste mal porque no te importaba. Tras meses y meses ves que lo que un día no te importó, ahora te importa. Discusiones, lloros, quizás te hizo pasar uno de los peores momentos de tu vida, pero todo sale adelante y el tiempo pone las cosas en su sitio, el miedo no vale, el miedo de enfrentarse a las situaciones no sirve para nada. Hoy día a día me atrevo a decir que fuiste un error que volvería a repetir, minuto a minuto, un error que no apartaría de mi vida, un error que convertiría en acierto si tú me lo demuestras. Podemos pasarnos la vida diciendo "te quiero" si ser verdad. Porque tú nunca me dijiste "te quiero" de verdad. Lo utilizaste para llevarme a muchos sitios y a ninguno a la vez. Si me demostrarás que, al menos me podías hacer feliz, que no me harías gastar una lágrima si no es de felicidad, que me abrazarías aun que estén tus amigos delante, que me harías pasar los mejores momentos de toda mi vida, entonces ahí yo pensaría que ese "te quiero" no lo utilizabas sólo para lo que tu querías. Tienes un poder sobre mí y es cierto, lo sabes. Me llevas como atada a tí y te busco pero no te encuentro. Un año o dos ya con esta tontería, ¿no crees que debería acabar? ¿No crees que lo mejor sería que dejase de ser una tontería y olvidarnos ya de todo? Tú con tus besos paraste el minutero de mi reloj y el tiempo no pasaba cuando nuestros cuerpos estaban juntos, contigo supe que no todo es como se dice, que hay algo más allá de los sueños, y que hay sueños que se cumplen y otros que no.