sábado, 1 de octubre de 2011

El significado de los sueños.


¿Sabes que es lo que más me gusta de ti? Como te pones a bailar, estés donde estés, y la gente te mira pero tú sigues a lo tuyo; como no puedes evitar hacer que alguien esté bien te cueste lo que te cueste; la capacidad asombrosa que tienes de ir a por lo que quieres aunque no tengas ni una posibilidad; la inmensa confianza que tienes en ti mismo y en todo lo que haces; la forma que tienes de mirarme; tu risa... la tengo grabada en mi cabeza y de ahí no sale; tu olor lo tengo conmigo, en cada camiseta o pantalón que llevaba puesto cada una de las veces que compartías tus abrazos conmigo; esa forma tan graciosa que tienes de hacerte el importante y de que nada va contigo; todos los recuerdos que se me han quedado grabados en mi cabeza... Pero no todo es bonito, porque, ¿sabes qué es lo que más odio de ti? Esa forma que tienes de arrastrarte, no soporto ver como juegan contigo y que tú sigas a pie de cañón, porque en el fondo sabes tan bien como yo que no te valdrá para nada pero tú no te rindes; que no me quieras, eso es lo que más odio de ti, bueno, en realidad que la quieras a ella, que sólo tengas ojos para ella cuando ella los tiene para, no sé, ¿5.000 tíos a parte de ti?
Mira yo ya me he dado cuenta de que no vas a tener más sonrisas que dedicarme, de que sólo tienes ojos para ella y el resto del mundo en tu cabeza no tiene hueco. Y, para serte sincera, he tardado mucho, demasiado, en darme cuenta y ahora sólo tengo que evitar la recaída, y eso deberías hacer tú. Sólo se trata de quererse un poco más, apreciar tu estado de ánimo y querer estar bien, tener autoestima, y más que nada darte cuenta de lo mala pécora que es ella.
Esto será, no digo lo último, pero será de las pocas cosas que escriba que podrás leer que vayan sobre ti, porque tal y como te he dicho, he dejado de ser la niña imbécil con la que se podía jugar, eso ya se acabó, porque tú para mi cada vez eres menos, significas menos y como no, cada día te quiero un poco menos, por mucho que me cueste decirlo y además, nunca pensé que llegaría a decirte esto pero... Voy a pasar de ti, ya no quiero quererte, no quiero que tú seas lo primero y lo último en mi vida, no quiero que mi felicidad dependa de ti y no quiero muchas cosas más... Y fíjate, de todo esto me he dado cuenta por un sueño, porque yo, ya no sueño contigo...

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